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CRÍTICA

'The Good Place': Qué bueno es morir

'The Good Place' se despide con un emocionante final en el que habla de la aceptación de la muerte y de cómo ser la mejor versión de nosotros mismos.

Por Adrián Jiménez Román 31 de Enero 2020 | 18:50

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¡Cuidado SPOILERS!

*En esta crítica se destripa el final de 'The Good Place'

El 19 de septiembre de 2016 NBC estrenó una sitcom llamada a revolucionar, una vez más, el género. Michael Schur, responsable de pelotazos como 'The Office' o 'Parks and Recreation', cogió de la mano a Kristen Bell y Ted Danson para lanzar 'The Good Place', una comedia arriesgada pero ligera, que se desarrolla en el más allá.

Ese primer episodio comienza con Eleanor, el personaje de Bell, despertando tras su muerte ante un cartel que reza: "Bienvenida. Todo está bien". Pronto descubriríamos que no, que no todo estaba bien y durante cuatro temporadas discurrimos por los entresijos de esta divertidísima muerte que nos arrancó más de un quebradero de cabeza. Al final del camino, muchos Jeremy Bearimys después, nos encontramos con que, por fin, todo está bien. De verdad. Todo está bien. ¿Y ahora qué?, se pregunta 'The Good Place'.

'Eleanor, Tahani y Janet en 'The Good Place''

Todo está bien

Y esa es la pregunta a la que trata de dar respuesta en su final. ¿Qué sucede cuando todo está bien? ¿Qué pasaría si tuviéramos la eternidad para hacer lo que queramos hasta sentirnos completos? ¿Cómo nos enfrentaríamos al final? En su último capítulo, 'The Good Place' se enfrenta al fin de la existencia desde un punto de vista maduro y complejo. Sus personajes tienen todo el tiempo que deseen y la oportunidad de cruzar una puerta que les lleva de regreso al universo.

Dentro saltos temporales y sueños cumplidos varios y 'The Good Place' se convierte en una carta de amor y despedida a cada uno de sus personajes. Jason, Tahani, Chidi... Cada uno va encontrando la paz y su lugar en el cosmos. Curioso caso el del personaje de Jameela Jamil, que termina convertida, esta vez sí, en alguien dedicado a ayudar a los demás, después de fallar estrepitosamente en su vida terrenal. Una arquitecta con todas las de la ley, que ayuda a aquellos que llegan al Más Allá a convertirse en mejores personas. Este camino de redención se adereza con una autoconsciencia del personaje, que no renuncia a ser una aristócrata amante de los lujos, pero encuentra la forma de incluir en su personalidad una brújula moral que la dirige hacia el bien por los demás.

'Eleanor y Chidi en 'The Good Place''

Cómo decir adiós a quien amamos

Los grandes giros de guion siempre han sido marca de la casa en 'The Good Place' pero aquí dejan paso a 54 minutos llenos a rebosar de emoción y amor por estos seis personajes. Es difícil no soltar alguna lágrima al despedirse de ellos, pues la serie construye un lazo muy fuerte entre personajes y en este final trata de lleno la aceptación de la muerte con una sensibilidad enorme.

Está en la naturaleza humana evitar el fin de nuestros seres queridos. Cuando Chidi le explica a Eleanor que se quiere marchar, ella lo obliga a quedarse, por su miedo a quedarse sola. Es una posición interesante a la que nos enfrenta, pues incluso cuando las personas que amamos no tienen nada que hacer aquí, y han encontrado la paz para marcharse, somos incapaces de dejarlos ir. ¿Cómo reaccionaríamos nosotros en esa situación? Son muchas preguntas las que nos plantea este episodio y cada uno tendrá sus respuestas. Eleanor, por su parte, es incapaz de seguir sus impulsos egoístas. "Te lo debo", le explica al personaje de William Jackson Harper.

Y entonces lo deja ir, Chidi cruza la puerta del bosque y todos sabemos que está bien. Que no pasa nada porque ha sido feliz y ha cumplido con lo que necesitaba. Y, aunque a veces notemos un picor en la garganta al recordarlo, está donde debe estar.

'Michael en 'The Good Place''

Cómo ser humano

En este capítulo, 'The Good Place' vuelve a poner sobre la mesa su estudio de la humanidad desde la comedia pero también desde la compasión. El camino de Michael, el personaje de Ted Danson, termina con el único plot twist del episodio. El demonio se transforma en humano y viaja a la Tierra para vivir una vida como la nuestra. Con calor, decepciones y mentirijillas. Pero demostrándonos de nuevo que esa vida humana merece la pena porque tendrá un final. "No sabré qué pasará cuando muera. No hay nada más humano que eso", afirma Michael.

El capítulo también tira de nostalgia y da un repaso por todos los secundarios que han pasado por aquí. Desde la maravillosa Jueza de Maya Rudolph hasta Mindy St. Claire o Shawn, todos tienen su momento de gloria. Tampoco faltan las bromas recurrentes ni las referencias al pasado. Pero aquí prima la emoción sobre la carcajada. Es un final en el que se intuye un peso enorme y donde la visión trascendental de la serie se despliega en todo su esplendor. Funciona porque viaja por la raíz, por las relaciones entre sus personajes y el amor que se profesan entre sí.

'Kristen Bell en 'The Good Place''

Volver al universo

Y llegamos a Eleanor, que después de ver cómo todos sus amigos encuentran su final, se siente completa tras conseguir que Michael se convierta en humano. Un margarita, un abrazo a Janet, y, por fin, camina hacia la puerta. En un último giro de gracia, Michael Schur nos descubre qué sucede en su mundo cuando terminas. Regresamos al origen convertidos en polvo brillante y volvemos a los demás para otorgarles un pedacito de nuestra bondad. Emocionante.

'The Good Place' ha sido como un ser humano. Irregular, brillante en sus mejores momentos y sin dirección en los peores (esa tercera temporada...). Pero nadie puede discutirle que es una ficción rompedora, que ha sabido introducir temáticas profundas y complejas de manera que parecían sencillas. Semana tras semana, nos ha puesto un dilema tras otro, enseñándonos a ser mejores personas y dando lecciones para expandir la bondad a su paso. Y todo ello con un corazón enorme latiendo por debajo.

Y es que morir no es malo si lo haces sabiendo que has hecho el bien. Ahora yo solo deseo que el final sea así. Una eternidad de felicidad junto a las personas que amamos hasta sentir que hemos terminado. Entonces nos sentaríamos solos en un banco a pensar. Y, cuando estemos listos, cruzaríamos una puerta para regresar al universo y devolverle toda la bondad que nos ha entregado. Y fin.

'The Good Place' está disponible en Netflix.

Nota: 9

Lo mejor: Cómo aborda la aceptación de la muerte desde la felicidad.

Lo peor: El camino irregular hasta este final ha hecho que muchas personas se bajen antes de llegar aquí.