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MUCHA QUÍMICA

'La ciudad perdida' recupera el espíritu clásico de la aventura romántica en un divertido placer (no) culpable

Sandra Bullock y Channing Tatum desprenden química en una comedia que nos devuelve con éxito la tradición de la aventura romántica al estilo de 'Tras el corazón verde'.

Pedro J. García
Por Pedro J. García Más 13 de Abril 2022 | 10:10
Redactor y crítico pop. Me apasiona la animación y veo series por encima de mis posibilidades.

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La aventura y el romance llevan cruzando caminos desde la edad dorada de Hollywood. Clásicos como 'Robin de los bosques' o 'La reina de África' sentaron las bases de este subgénero que mezclaba con éxito amor y acción en un cóctel irresistible para la audiencia. Los 80 fueron una época especialmente fértil para la aventura romántica, con 'Tras el corazón verde' como uno de los principales exponentes. La película protagonizada por Michael Douglas y Kathleen Turner nacía a rebufo de 'Indiana Jones en Busca del Arca Perdida', pero su impacto fue tal que revitalizó el género e inspiró numerosos productos similares que reinaron en los 80 y 90.

Channing Tatum y Sandra Bullock

Casi cuatro décadas más tarde, la comedia romántica para adultos no atraviesa su mejor momento. Mientras el cine se mantiene a flote gracias a las grandes sagas y las propiedades intelectuales reconocidas, a las producciones originales de presupuesto medio y sin gancho de marca les cuesta llegar a las salas y han encontrado su nuevo hogar en el streaming. En este contexto y justo cuando más la necesitamos, aparece 'La ciudad perdida', heredera directa de 'Tras el corazón verde', que comparte tanto con su antecesora que muchos han creído, y con razón, que se trata de un remake.

Pero no, el film dirigido por Aaron y Adam Nee (los responsables del futuro live-action de 'Masters of the Universe') no es una nueva versión del clásico de los 80, aunque lo parezca, sino un homenaje que reivindica los placeres simples y efectivos de ese tipo de películas que ya no son una prioridad para un Hollywood obsesionado con las franquicias y con una taquilla en pleno proceso de reformulación por la pandemia. Sandra Bullock y Channing Tatum son la infalible pareja protagonista de una película que sabe exactamente lo que es y conoce perfectamente a su público, un producto fácilmente clasificable como placer culpable que, sin embargo, invita a disfrutarse como lo que es: un placer a secas.

Actualizando lugares comunes

La película sigue a Loretta Sage (Bullock), una autora de novelas románticas de aventuras que abandonó su pasión por la arqueología tras la muerte de su marido, encontrando un éxito inesperado en la literatura rosa gracias a su saga 'La ciudad perdida de D'. Sage, que ha perdido la ilusión y vive únicamente para escribir, se embarca a regañadientes en la gira promocional del último libro de la serie, pero por miedo a que su carácter huraño y reservado se cargue la promoción, se ve obligada a compartirla con el atractivo modelo que aparece en todas las portadas de sus libros representando al héroe protagonista, Alan (Tatum), quien ha basado toda su carrera en personificar al galán ficticio, llamado Dash.

Alan

Durante la primera presentación del libro, Loretta es secuestrada por un excéntrico multimillonario (Daniel Radcliffe) que ha estudiado muy de cerca a la autora y la necesita para llegar hasta el tesoro de la antigua perdida en torno a la que gira su último libro. Decidido a demostrar que es un héroe real y no solo una falsa proyección del personaje que ha creado Loretta, diseñado para suscitar los sueños más eróticos de sus lectoras, Alan se lanza sin pensarlo ni un segundo a su rescate, zambulléndose juntos en una peligrosa aventura por la jungla en la que tendrán que aprender a dejar a un lado sus diferencias para sobrevivir y encontrar el tesoro antes que sus enemigos.

Sí, el argumento es un calco de 'Tras el corazón verde', como decíamos, pero 'La ciudad perdida' no solo es consciente de ello, sino que lo utiliza para su ventaja, rindiéndole tributo (hay algún que otro guiño directo), a la vez que actualiza algunos de los lugares comunes propios del género, trayéndoselo al siglo XXI sin traicionar en ningún momento su esencia. En este sentido, la forma en la que reescribe a su pareja protagonista, alejando a Alan del típico macho canalla e intercambiando entre ellos el papel de damisela en apuros a lo largo del metraje, es la razón principal por la que la película triunfa en su reciclaje de ideas, evitando caer en el refrito sin alma. Pero no solo eso, sino que además, el film aporta las dosis justas de corazón, honestidad y simpatía para redondear la fórmula y llegar a buen puerto.

Pareja perfecta

'La ciudad perdida' es un vehículo de lucimiento hecho a la medida de Bullock (que además de protagonizar, produce) y Tatum, que aprovechan cada oportunidad que les lanza el guion para volver a poner en práctica los puntos fuertes con los que han construido sus respectivas carreras sin miedo a hacer el payaso. Con su Loretta Sage, Bullock nos devuelve el espíritu de 'Miss Agente Especial', demostrando su indudable talento para la comedia física (impagable verla por la jungla ataviada con su instantáneamente icónico mono rosa de lentejuelas) y su carisma como protagonista torpe pero encantadora. Tatum, por su parte, hace lo propio con un personaje que le permite demostrar una vez más que, más allá de su físico y su destreza para la acción, es un actor cómico estupendo. Y si individualmente merecen elogios por saber siempre cómo sacarse el mejor partido, lo mejor es que, cuando están juntos, saltan las chispas.

Jugando con los tópicos de las novelas románticas, una industria que mueve millones, en un ejercicio meta muy acertado, la película construye la relación entre Loretta y Alan apoyándose en el clásico recurso de enemigos a amantes, desarrollando un divertido tira y afloja que es el pilar sobre el que se sostiene toda la historia. A destacar el hecho de que haya una considerable diferencia de edad entre ellos, siendo ella mayor que él (Bullock tiene 57, Tatum 41), lo cual no se convierte en ningún momento en un chiste o un elemento importante de la trama, un refrescante detalle que derriba estereotipos rancios de Hollywood. Pero es que cuando hay tanta química entre dos intérpretes, lo demás es secundario.

Channing Tatum y Sandra Bullock en 'La ciudad perdida'

Bullock y Tatum se complementan al cien por cien y brillan en todo: comedia, acción, tensión romántica. Pero no están solos, sino que los acompaña un reparto inmejorable, un grupo de actores cómicos que nos deja momentos tronchantes y diálogos llenos de chispa. Gracias a ellos, la película apenas baja el ritmo y se mantiene consistentemente divertida. Las risas están garantizadas con las graciosísimas Da'Vine Joy Randolph y Patti Harrison, que interpretan respectivamente a la agente y la community manager de Loretta, Oscar Nuñez ('The Office') aporta la nota adorablemente marciana, y el mismísimo Daniel Radcliffe continúa sumando personajes excéntricos con el villano de la cinta, demostrando que sigue haciendo lo que le da la gana después de 'Harry Potter', y bien por él. Pero si hay un actor que se lleva el título de robaescenas de la película, ese es Brad Pitt. El famoso actor se entrega por completo al chiste y despliega su talento cómico con un papel explosivo y deliciosamente absurdo, firmando una participación breve, pero muy memorable.

Diversión sin parar, pero ¿demasiado segura?

Precisamente Pitt representa bien la clave de 'La ciudad perdida': esa capacidad para no tomarse demasiado en serio y ponerse como principal objetivo hacer pasar un buen rato. Salta a la vista cuando un reparto se lo está pasando bien rodando una película y esa diversión se contagia inevitablemente al espectador. Y eso es exactamente lo que ocurre aquí. Pero por supuesto, también hay que otorgarle su mérito al guion, firmado a cuatro manos por un ecléctico grupo de escritores (con trabajos tan dispares entre ellos como 'Cruella', 'Mortal Kombat' o 'Infiltrados en la universidad'). Los guiones colectivos no siempre salen bien, pero en este caso han sabido extraer y conjugar los ingredientes del cine de aventuras, la comedia de acción y el romance para dar forma a un producto bien diseñado, que funciona tanto como homenaje/parodia a la literatura romántico-erótica y la aventura cazatesoros como un producto fresco con energía propia.

Si acaso, se le puede achacar cierta falta de riesgo. Aunque no faltan los momentos picantes (la escena de las sanguijuelas con Tatum completamente desnudo es uno de los platos fuertes del menú) y pasados de rosca (toda la parte de Pitt), es inevitable sentir que podrían haber ido un poco más allá. Quizá se queda un poco en lo seguro, en lo que sabe que funciona, y aunque tiene sus momentos delirantes, no se atreve a volverse tan loca como algunos habríamos querido. Algo que tampoco supone mucho inconveniente, porque lo que hace, lo hace tan bien que es muy fácil dejarse llevar y disfrutar, aunque se le quede a uno la sensación de que tenían el material perfecto para ir más allá y no quedarse en la zona de confort.

'La ciudad perdida'

Claro que, es precisamente en ese confort donde encontramos a la vez su mayor baza. En lo reconfortante de lo familiar, de lo esperable. En este caso, saber lo que va a pasar establece una complicidad con la audiencia basada en el conocimiento y el cariño por este tipo de historias que de una forma u otra han estado siempre presentes en nuestras vidas. Porque 'La ciudad perdida' no engaña, es muy autoconsciente y le da al espectador lo que quiere. Pero ojo, no hay que menospreciarla por eso, al contrario. Es una película muy inteligente en su sencillez que logra algo que no todas las propuestas cortadas por el mismo patrón consiguen: resultar sincera y genuina. Y además, divertida, mucho, y sexy, incluso tierna, con acción moderna, pero también esa magia de la comedia screwball clásica que le da un toque atemporal y nos recuerda que hay cosas que nunca pasarán de moda.

'La ciudad perdida' no inventa (ni reinventa) nada, pero su llegada a los cines -y su éxito de taquilla en Estados Unidos- es motivo de celebración. En una época en la mayoría de películas como esta van directamente a streaming y se olvidan rápidamente (la similar, pero inferior 'Alerta Roja', por citar un ejemplo cercano), que una aventura romántica clásica no asociada a una IP famosa se abra camino en una cartelera llena de secuelas y universos compartidos, es una buena noticia. Aunque resulte contradictorio que, al final, nos quedemos con tantas ganas de volver a ver a Loretta y Alan en una o varias secuelas.

Es curioso, porque Sandra Bullock y Channing Tatum nos recuerdan con sus personajes aquello de que no hay que juzgar un libro por su portada, pero en el caso de 'La ciudad perdida', no pasa nada por hacerlo, porque lo que hay en sus "páginas" es justo lo que esperábamos. Y lo que queríamos.

Nota: 8

Lo mejor: Es genuinamente divertida y disfrutona, sin complejos. Su pareja protagonista es la bomba y los secundarios ponen la guinda en el pastel. Lo de Brad Pitt es muy grande.

Lo peor: Le falta riesgo y podría haber hecho incluso más con su inversión de los estereotipos de género y los tópicos de las novelas románticas.