Curiosidades de 'Junior', la disparatada comedia con Arnold Schwarzenegger embarazado

Los guionistas Chris Conrad y Kevin Wade habían escrito conjuntamente el guion de 'Junior', a la espera de encontrar un estudio que les comprase la idea.

El hecho de que Wade hubiese sido el responsable del libreto de 'Armas de mujer', fue lo que dio ciertas esperanzas a que este fuese tenido en cuenta, entrando entonces en juego la Universal, quien se encargaría de distribuir la película y para cuya dirección pensaron en Brian Levant, que acababa de dirigir 'Este chico es un demonio 2' y 'Beethoven - Uno más de la familia'.

Una vez que Arnold Schwarzenegger ya fue considerado para ser el protagonista, fue el propio actor quien puso como condición que el director debería ser Ivan Reitman.

Tratándose de una de las grandes estrellas del momento, su propuesta fue aceptada al pie de la letra, quedando Brian Levant al margen. Por cosas del destino, el hecho de quedarse sin la batuta de director para 'Junior', hizo que el realizador se quedase libre para dirigir una película que le propondría el mismísimo Steven Spielberg: 'Los Picapiedra'.

Con Reitman ya como director, este no se lo pensó dos veces a la hora de contactar a Danny DeVito, con quien ya había trabajado anteriormente.

'Junior' sería el cierre para la trilogía de comedias del tándem Reitman-Schwarzenegger, que habían colaborado por primera vez en 'Los gemelos golpean dos veces' (junto a DeVito) y en 'Poli de guardería'.

Con la intención de prepararse para el papel, Schwarzenegger no tuvo bastante con aprenderse el guion, pues para sentir en su propia piel cómo iba a sentirse el personaje del Dr. Alex Hesse, varias semanas antes del rodaje decidió llevar una barriga de embarazada ficticia durante su día a día.

Además, pasó horas en una sala de espera de una clínica de obstetricia y ginecología, con el fin de tomar nota del comportamiento de las mujeres embarazadas que se encontraba allí.

Un primer montaje final de la película, acababa con un aborto, algo que fue considerado demasiado políticamente incorrecto e hizo saltar las alarmas en el estudio, pues podría ser algo que hiriese la sensibilidad de algunos espectadores.

Fue por ello por lo que se tuvieron que volver a rodar varias escenas, con el fin de conseguir el happy end con el que 'Junior' llegó a los cines.

Pese a que pareciese tratarse de una trama novedosa, la de 'Junior' ya fue tachada de poco original cuando se estrenó, ya que no era la primera película que trataba un aspecto tan delirante como un embarazo masculino.

En 1973, el cineasta francés Jacques Demy dirigía 'No te puedes fiar ni de la cigüeña', con Marcello Mastroianni en el papel de Marco Mazetti, quien descubriría al acudir al ginecólogo con su novia Irene (Catherine Deneuve), que quien estaba embarazado era él.

En 1978, Joan Rivers escribía y dirigía 'Un tipo muy especial', la cual suponía el debut como actor de Billy Crystal, en el papel de un profesor con mala suerte en el amor, que se quedará embarazado la noche que pierda la virginidad.

Teniendo en cuenta los éxitos en taquilla que habían supuesto 'Los gemelos golpean dos veces' y 'Poli de guardería', se auguró que 'Junior' podría superar a estas dos, las cuales había recaudado más de 200 millones de dólares en todo el mundo.

Habiendo costado 60 millones de dólares, 'Junior' se estrenó en Estados Unidos el fin de semana previo a Acción de Gracias, motivo por el cual se había confiado en él como una de las grandes apuestas de la temporada de la Universal.

Sin embargo, pese a conseguir ser uno de los mejores estrenos en dicha fecha, alcanzando los 10 millones de dólares de recaudación en su primer fin de semana, pronto se hundió en taquilla haciendo que brillase con luz propia el verdadero fenómeno del momento: '¡Vaya Santa Claus!', protagonizada por Tim Allen.

Finalmente, la película se tuvo que conformar con los 108,4 millones que hizo en todo el mundo, la mitad de lo que habían conseguido los anteriores films de Reitman y Schwarzenegger.

La crítica cinematográfica del momento no estuvo muy a favor de 'Junior', siendo tal vez uno de los factores que hiciera que el público no fuese a verla con las mismas ganas que lo había hecho con las anteriores comedias de Schwarzenegger.

Sorprendentemente, y pese a ser considerada como una de las voces más importantes del sector y cuya opinión parecía ir a misa, el crítico Roger Ebert le dio dos pulgares hacia arriba en su programa de televisión, llegando a decir que la película le parecía divertidísima y que se declaraba fan de ella.

Tal afirmación (la de más arriba de la imagen) es la que confesó rotundamente en 2007 Sandy Smith, la artista visual escocesa responsable de 'Junior: A monument in film making history', un ensayo que realizó con unas bases tan sólidas como lo podían ser la filosofía y la sociología, teniendo en cuenta teorías de los mismísimos Freud o Foucault, y en el cual desgranaba sin poder los motivos por los que consideraba que la película de Reitman era la mejor que se había rodado jamás.

Por si fuera poco, y sin saber aún muy bien si lo suyo fue trolleo o puro amor incondicional, durante un tiempo estuvo abierto en un concurso en su web donde se invitaba a que la gente diese su opinión favorable a la película.