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CRÍTICA

'La influencia': Una propuesta interesante a medio camino entre el terror psicológico y el explícito

El debut en el largometraje de Denis Rovira se mueve como pez en el agua dentro del drama familiar, pero falla en el terror más explícito.

Por Mario Caridad Sánchez 21 de Junio 2019 | 09:50

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En un momento en el que podemos decir que el cine de terror experimenta un auge con dos tipos de películas, las que forman parte de un universo ya creado como las sagas 'Expediente Warren' o 'Chucky, El muñeco diabólico', y las que introducen a los espectadores en historias originales como 'Déjame salir', 'Nosotros' o 'Hereditary', nos encontramos con una producción nacional que adapta un clásico de la literatura británica de este siglo.

 'La influencia'

Con 'La influencia', el debut en el largometraje de Denis Rovira Van Boekholt, el cineasta nos presenta la adaptación de la novela homónima escrita por Ramsey Campbell, en la que asistimos al regreso de Alicia a la casa de su infancia junto a su marido Mikel y su hija Nora para encargarse de los cuidados de su madre, una mujer sumergida en un coma que desde pequeñas las controlaba, maltrataba y obligaba a realizar rituales satánicos fruto de su obsesión con estas prácticas.

Sin lugar a dudas, uno de los grandes aciertos del film es su reparto: Maggie Civantos y Manuela Vellés consiguen realizar una interpretación convincente poniéndose en la piel de dos hermanas completamente opuestas. La primera más supersticiosa frente al escepticismo de la segunda, que ha decidido bloquear los traumas de su pasado para poder regresar a la casa de los horrores, algo que sin embargo no le será fácil una vez allí.

Emma Suárez, que se introduce en el género de terror interpretando a la abuela terrorífica que nadie querría tener, consigue ponernos los pelos de punta sin apenas diálogos, sin abrir los ojos ni moverse de la cama; y una jovencísima Claudia Placer realiza un trabajo más que decente sobre todo hacia la segunda parte del film, cuando la niña buena deja paso a una macabra criatura bajo la influencia de la matriarca de la familia.

Junto a este reparto mayoritariamente femenino, el drama familiar que se desarrolla a lo largo de la primera parte de la película, donde se introducen los primeros tintes de terror psicológico y la incertidumbre ante lo que va a pasar a continuación, es otro de los puntos fuertes de 'La influencia'. La carrera de Rovira Van Boekholt ha destacado siempre por su interés por estas relaciones familiares truncadas, y con esta adaptación vuelve a demostrarnos cómo de tergiversados (y peligrosos) pueden llegar a ser los lazos de sangre.

Menos es más

Sin embargo, frente a una primera parte bastante sugerente, una segunda parte en la que el terror psicológico degenera en un terror más explícito llega a ensuciar la imagen general de la cinta, donde en ocasiones los efectos especiales utilizados llegan a trabajar en contra del propio proyecto, provocando la salida casi inmediata del espectador que se había sumergido en la historia.

 'La influencia'

Las decisiones sobre la iluminación y la introducción de ciertos diálogos son igualmente cuestionables. La luz roja que invade la habitación donde se encuentra Victoria (Suárez) consigue provocar un efecto de sobre-explicación para los asistentes al cine, un elemento que indica constantemente dónde debemos prestar atención sin dejar espacio a la sorpresa, como un dedo que te señala donde mirar sin preocuparse realmente por construir una atmósfera de tensión en la que no sean necesarios este tipo de trucos.

De esta manera, nos encontramos ante una cinta con el potencial suficiente para ser una historia redonda, pero que se queda a medio camino como consecuencia de fallos que hubiesen sido fácilmente subsanables. Las actuaciones son prácticamente impecables, pero no son suficientes.

Nota: 5

Lo mejor: Un reparto mayoritariamente femenino que ofrece una interpretación más que aceptable.

Lo peor: La forma en la que el terror psicológico del principio degenera en un terror explícito, donde los efectos especiales y algunos elementos de la puesta en escena no juegan a su favor.