Los mundos de 'Kingdom Hearts III' ordenados de peor a mejor

El mundo de Winnie the Pooh no es precisamente uno de los mundos más queridos por los seguidores de 'Kingdom Hearts'. Su implementación en esta tercera entrega numerada no terminó por generar demasiada expectación, y, sin duda, el resultado final que se puede ver en el juego despierta muchísimo menos.

Mientras que en 'Kingdom Hearts', 'Kingdom Hearts 2' o 'Kingdom Hearts: Chain of Memories' se podía disfrutar de minjuegos de lo más destacables, en 'Kingdom Hearts III' nos encontramos ante un Bosque de los 100 Acres que solamente cuenta con una única y diminuta zona y de un único y monótono minijuego de recolectar frutas y hortalizas.

Además, su aportación a la historia del juego es totalmente nula, siendo un mundo cuya función se limita a ser un complemento del minijuego de cocina de Remi en Villa Crepúsculo de cara a conseguir ingredientes. Sin duda, el mundo más decepcionante de 'Kingdom Hearts III'.

La inclusión de mundos Pixar era una de las principales novedades de 'Kingdom Hearts III', aunque, en el caso de Monstrópolis, el mundo de 'Monstruos, S.A.', el resultado podría haber estado mucho más a la altura. Resulta una experiencia magnífica el poder explorar todos los escenarios de la película de Pete Docter y Lee Unkrich, pero el transcurso del mundo se limita a un desarrollo demasiado pasillero que no explota todas las posibilidades que podría haber dado.

Lo que podría haber sido una experiencia muy vistosa visitando variados y exóticos lugares mediante la mecánica de viaje a través de las puertas por la que se guía 'Monstruos S.A.', acaba por resultar una fase del juego bastante monótona que luce bastante desaprovechada. Además, a nivel argumental, pese a presentarse como una continuación de los hechos de la película, se limita a volver a reproducir la parte final del filme en la que Sully y Mike buscan la puerta de Boo para llevarla de vuelta a su mundo.

Nada más aterrizar en Reino de Corona nos encontramos ante un mundo repleto de vida, verdor y mucha espectacularidad visual, percatándonos de estar ante uno de los mundos más técnicamente destacables de 'Kingdom Hearts III'. Sin embargo, su desarrollo termina por estar limitado a avanzar por un largo, repetitivo y pasillero escenario desde la torre de Rapunzel hasta la ciudad del reino mientras suceden recreaciones plano a plano de los sucesos de 'Enredados'.

En general, estamos ante un mundo bastante admirable que encantará a los más fans de este clásico Disney estrenado en 2010, pero sin duda, toda la propuesta de la película y el gran nivel técnico que se deja vislumbrar podría haber dado para algo mucho más admirable y no tan monótono.

En 'Kingdom Hearts III' se aprecian algo las prisas a las que tuvo que hacer frente el equipo de desarrollo para finalizar el juego, y, sin duda, el mundo de un clásico Disney ciertamente reciente como es 'Big Hero 6' se ha visto algo perjudicado por ello.

Estamos ante un mundo con unas mecánicas bastante novedosas, entretenidas y destacables, donde el manejar a Baymax a través de toda la ciudad o participar en los minijuegos de los circuitos de luz terminan siendo enormemente divertido. En cambio, el contenido del mundo se hace bastante corto, la zona acaba por ser algo limitada y a nivel visual llega incluso a apreciarse texturas no del todo pulidas.

A pesar de ello, San Fransokyo desprende mucho potencial respecto a todo los que sus mecánicas ofrecen. Esperemos que en un futuro decidan aprovecharlo mucho mejor añadiendo más contenido mediante posibles DLCs.

Siempre es toda una delicia volver a Villa Crepúsculo. Pisar de nuevo este mundo hace que nos vuelva a invadir una gran sensación de nostalgia al visitar esos crespusculares escenarios que tanta importancia tuvieron en 'Kingdom Hearts 2' y 'Kingdom Hearts 358/2 Days'. Y, claramente, el verlo recreado con grandes gráficos en alta definición en 'Kingdom Hearts III' es uno de los grandes placeres que nos ofrece esta tercera entrega numerada de la franquicia.

Además, dentro de Villa Crepúsculo se nos introduce al personaje de Remi de 'Ratatouille' dentro de 'Kingdom Hearts', trayendo consigo la implementación de varios minijuegos de cocina que, pese a ser bastante breves, resultan bastante destacables y adictivos.

Aunque, a pesar de todas sus grandes virtudes, las prisas vuelven a notarse en el desarrollo de este mundo, estando únicamente formado por las zonas de la plaza y de la mansión y dejando una sensación algo agridulce en cuanto a este aspecto.

'El mundo de 'Frozen: El reino del hielo' no podía faltar en 'Kingdom Hearts III', e, indudablemente, los responsables del juego han puesto toda la carne en el asador para satisfacer a los más fans de este exitoso clásico Disney.

Y es que, además de poder vivir de primera mano la historia de la película, el juego nos ofrece nuevos y muy admirables escenarios inéditos en el film como el caso del Laberinto de hielo, divertidos minijuegos como el Deslizamiento alpino o la oportunidad de disfrutar y jugar en espectaculares escenarios nevados.

La única pega con la que cuenta este mundo es la confusión narrativa con la que se presenta la historia de la película, notándose más ímpetu en incluir momentos musicales de forma un tanto forzada que en narrar bien el argumento. Aunque todo es fácilmente perdonable.

Pese a que el mundo de Monstrópolis no llegue a explotar todo su potencial, Pixar termina por ver su mayor esplendor en 'Kingdom Hearts III' en el mundo de 'Toy Story'. Caja de Juguetes termina por ser un variado y amplio escenario en el que se dan cita mecánicas variadas, divertidísimos combates de robots y una gran sensación de nostalgia que cautivará a todos aquellos que crecieron con esta aclamada saga de Pixar. Mención especial al hecho de poder disfrutar del mundo y todas sus virtudes a ritmo de la partitura de 'Hay un amigo en mí'. Incluso logrará hacerte soltar alguna lagrimilla.

El primer mundo que visitamos en el juego y uno de los más admirables que ofrece esta tercera entrega numerada de 'Kingdom Hearts'. Y es que 'Kingdom Hearts III' no puede tener mejor carta de presentación que el mundo de 'Hércules', un escenario enorme, largo y con un magnífico desarrollo que resulta perfecto para redescubrir todas las novedades en jugabilidad y gráficos que ofrece el juego. Muy destacable toda la parte del ascenso al monte, el combate contra el titán de piedra a bordo de la atracción del tren o la fastuosa zona de los dioses. Todo un espectáculo de mundo.

Y llegamos al que casi de forma indudablemente es el mejor mundo de 'Kingdom Hearts III'. Y es que no solamente El caribe es el mundo más espectacular a nivel visual, presentando unos diseños y texturas tan realistas que te hacen pensar que estás viendo una película de acción real; sino que es el mundo con mejores mecánicas, mayor cantidad lugares para explorar y con mayor dosis de diversión.

El explorar todas las islas, el fondo marino, grandes cavernas, barcos hundidos o el montarte a bordo de un navío y formar parte de entrenidísimas batallas navales o abordajes acaba por convertirse en uno de los mayores alicientes que nos ofrece 'Kingdom Hearts III', haciendo que quieras pasarte largas partidas en El Caribe explorando este mundo de principio a fin.