Las primeras películas originales de Disney+ de peor a mejor

Películas sobre el paso de la niñez a la edad adulta son difíciles de hacer bien, especialmente en un panorama cinematográfico en el que ya hemos visto mil veces historias de la vulnerabilidad e inseguridad de la juventud ('Las ventajas de ser un marginado', 'Lady Bird') o del primer amor y el primer desamor ('Con amor, Simon', 'Call Me By Your Name'). Para hacerse un hueco en este mercado ya muy saturado, una película sobre la llegada a la madurez tiene que sentirse distinta y, desafortunadamente 'Stargirl', la adaptación de la novela de 2000 de Jerry Spinelli a manos de la directora Julia Hart, no consigue decir nada nuevo sobre esta época intensa de la vida.

'Stargirl' gira en torno al joven Leo Borlock (Graham Verchere), un estudiante que tiene ganas de adaptarse a la cadena alimenticia de su escuela de secundaria hasta que conoce a la nueva estudiante Stargirl Caraway (Grace VanderWaal), una chica bohemia que inmediatamente se convierte en una fuente de fascinación para los demás debido a su estilo hippie, sus peculiaridades y sus habilidades envidiables con el ukulele. Es el ukulele el que causa algunos de los momentos más encantadores de la película; Grace VanderWaal ganó el concurso de 'America's Got Talent' por su talento como cantautora y, junto a Graham Verchere, los dos utilizan su música para traer encanto y energía a la película sobre la importancia de la individualidad en un momento de la vida en el que solo quieres formar una parte de la multitud. Sin embargo, la película no alcanza las expectativas de ser una historia profunda de la llegada a la madurez por culpa de la caracterización de Stargirl, quien se representa como una herramienta para el desarrollo del personaje soso de Leo en vez de un personaje por derecho propio. Es una fórmula familiar, el personaje femenino unidimensional que provoca el desarrollo del protagonista masculino y, para una película sobre la individualidad, la perpetuación de este cliché es irónicamente poco original. Si esto se añade a un guión que intenta ser profundo pero en realidad parece pretencioso, el resultado es una película olvidable que solo merece ser vista por las canciones pegadizas.

¿Quién hubiera pensado que una de las películas más románticas del canon entero de Disney sería la de dos perros de clases sociales diferentes? Cualquiera que hubiera visto la escena en la que Golfo da la última albóndiga a Reina, sabe que así es. Bajo la dirección de Charlie Bean,Tessa Thompson y Justin Theroux realizan interpretaciones sobresalientes de esta pareja icónica, poniéndose voces a Golfo y Reina respectivamente. La emoción, vulnerabilidad y su descenso lento hacia el amor se representan con las entonaciones de voz y las habilidades de dos perros muy obedientes. Visualmente, la película es de otro nivel. 'La dama y el vagabundo' se ambienta en Nueva Orleans y el equipo creativo aprovecha de este lugar famoso por su diversidad y vivacidad para llenar cada plano con color y escenarios distintivos que cautivarán tanto a la audiencia mayor como los niños que están viendo esta historia de amor por primera vez.

Desafortunadamente, la película no consigue recuperar el encanto de la original, como es la tendencia de los remakes en acción real de Disney. A diferencia de las interpretaciones de los actores de voz, los personajes interpretados en acción real son unidimensionales por culpa de un guión empalagoso. Lo que es más, con la excepción de la rendición adorable de 'Bella Notte', ni con la presencia de artistas musicales como Janelle Monáe pueden ofrecer una banda sonora de la talla que esperamos de Disney.

En pocas palabras, 'La dama y el vagabundo' es visualmente fantástica y cuenta con unas interpretaciones impresionantes, pero le falta el corazón de la original.

Cuando una película empieza con las palabas "basada en hechos reales" antes de que haga un paneo hacia fuera para revelar el paisaje cubierto de hielo de Alaska mientras un hombre singular conduce un trineo tirado por perros en estas condiciones glaciales, sabes que va a ser una historia fascinante.

'Togo' está inspirada en los sucesos de la carrera del suero a Nome de 1925, cuando 20 mushers condujeron sus trineos tirados por perros a lo largo de más de 1.000 km de paisajes áridos y peligrosos al pueblo de Nome para entregar el remedio para la epidemia de difteria que estaba acabando con su gente. Willem Dafoe está magistral en el papel de Leonhard Seppala, un musher que, por deseo de su esposa, accede a entrenar a un perrito poco disciplinado para dirigir su trineo. El vínculo que Leonhard forma a regañadientes con este perro, Togo, es muy bonito y la audiencia tiene el placer de ver cómo esta conexión se convierte en algo profundo y casi espiritual que promete provocar lágrimas en cualquiera que tenga amor por los animales.

El director, Ericson Core, hace un trabajo excelente para representar el viaje atrevido por la naturaleza alucinante de Alaska con planos generales de la extensa agua helada que se yuxtaponen con los primeros planos de la intensidad y la concentración en la cara del siempre maravilloso Dafoe.

El único aspecto de la película que no convence es su duración. La película dura 113 minutos y la historia, salpicada con flashbacks frecuentes, no puede sostener el suspense por este período de tiempo.

Nunca supimos que necesitábamos una película sobre un niño con un sentido de humor socarrón que resuelve crímenes en Portland con su amigo imaginario, un oso polar torpe e inepto, hasta que vimos esta bonita película dirigida por Tom McCarthy.

Timmy DeSastre cree que está destinado a la grandeza, solo necesita arrancar su agencia de detectives a través de resolver el misterio de la mochila perdida de uno de sus compañeros de clase. Winslow Fegley, el actor de 11 años que interpreta a Timmy, es una estrella en ciernes. Dice cada línea y chiste con la combinación perfecta de humor socarrón y una cadencia cómica impecable que rivaliza con las de Ophelia Lovibond y Kyle Bornheimer, que interpretan a su madre y su nuevo novio con tanto corazón y sinceridad que querrás llamar a tu propia familia disfuncional después de haber visto la película.

El estilo de 'DeSastre & Total' es muy inteligente. Con la voz en off de Timmy para dirigir nuestra atención, a menudo la película nos sumerge en las fantasías de Timmy y representa la imaginación hiperactiva de este joven con bocetos en el estilo de comics o con malinterpretaciones de lo que otra gente le está diciendo (en una escena, el novio de su madre le ofrece una pata de conejo para que tenga suerte y Timmy imagina un escenario en el que este hombre es un asesino de conejos, por ejemplo). Aún con esta dosis generosa de humor, la película nunca pierde su corazón y explora temas relevantes como el miedo a crecer y la presión para adaptarse. Toda la familia, tanto si tienes noventa años como si tienes nueve, quedará encantada por la historia de Timmy y sus travesuras.