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CRÍTICA

'The Last of Us' es la mejor adaptación posible para un videojuego con una historia que deja huella

Pedro Pascal y Bella Ramsey encabezan el reparto de una firme candidata a serie del año, una adaptación que sabe expandir aspectos que el videojuego no tenía tiempo a profundizar.

Jesús Agudo
Por Jesús Agudo Más 10 de Enero 2023 | 09:01
El redactor más veterano de esta web. Palomitero y fan de que las series estrenen un capítulo por semana.

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'The Last of Us' es la mejor adaptación posible para un videojuego con una historia que deja huella

Voy a ser sincero: tenía mucho miedo a la serie de 'The Last of Us'. Creo que tenía mis razones, y ninguna tenía que ver con la supuesta leyenda negra de las adaptaciones de videojuegos que lleva años invalidada por propuestas que sí han sabido dar productos audiovisuales decentes. Mi problema era, precisamente, con las expectativas que podía tener a nivel narrativo. Es posible que nunca haya rumiado tanto la historia de un videojuego, que nunca haya debatido tanto y que no haya dado tantas vueltas a un título como al que lanzó Naughty Dog en PlayStation 3 en 2013. Una aventura que a nivel jugable es fantástica. Pero a nivel narrativo... está a años luz de prácticamente todo el sector en los últimos años.

'The Last of Us'

Es tal el viaje de Joel y Ellie que HBO lo tenía muy fácil y a la vez terriblemente difícil triunfar con una adaptación. Fácil porque donde suelen flojear las películas o series basadas en videojuegos es que no son capaces de eliminar la sensación de pasividad al no ser partícipes de lo que está ocurriendo. De que el videojuego se vive más porque estamos, literalmente, a los mandos. 'The Last of Us' podía desechar ese problema porque su principal fuerte es su guion, su atmósfera, su música, sus interpretaciones. Todo es fácilmente extrapolable a la acción real. Y sin embargo, ¿para qué, entonces, era necesaria una serie cuando el videojuego lo ha hecho tan bien? Neil Druckmann y Craig Mazin fueron capaces de disipar cualquier duda que yo tuviera con la primera escena del primer episodio.

'The Last of Us' cuenta la historia de Joel (Pedro Pascal), un hombre cuya vida se desmorona cuando una pandemia mundial, consecuencia de la mutación del hongo Cordyceps, acaba con la sociedad como la conocemos. Muchos años después del brote masivo de este hongo capaz de controlar a su anfitrión y convertirlo en una criatura que no se detendrá ante nada para seguir expandiéndose hacia otras víctimas, Joel vive en un Boston derruido y bajo un estricto control militar. Trabaja como mercenario simplemente para seguir un día más. Pero su vida vuelve a cambiar cuando le asignan la misión de custodiar a una chica llamada Ellie (Bella Ramsey) fuera de los límites de la ciudad y entregarla a los Luciérnagas, un grupo considerado terrorista que busca acabar con el control del ejército. Para él, la niña es simple mercancía. Pero para el mundo... quién sabe lo que pueda llegar a ser.

'The Last of Us'

Aunque de primeras los que no hayan jugado al juego puedan pensar que esta es la típica trama de zombies, 'The Last of Us' es muchísimo más: es un impresionante viaje a las entrañas de lo que nos hace humanos, y lo fácil que sería que perdiéramos esa humanidad en condiciones extremas. Viniendo de una pandemia conocemos perfectamente esa sensación. Los aplausos en balcones no eclipsaban el egoísmo de arramblar con todos los rollos de papel higiénico, y allá se las arregle el siguiente. 'The Last of Us' resulta un terrorífico "qué pasaría si", mostrando (ahora entendemos que de manera bastante clarividente) cómo estaríamos si no hubiéramos podido controlar el coronavirus y hubiera imperado la ley de la selva. Desde el principio de la serie nos enfrentamos con Joel a situaciones difíciles y a soluciones que lo son mucho más. Vemos cómo en realidad los supervivientes ya no viven, sino que aguantan porque a eso hemos venido a la Tierra. Sin esperanza. Pero sin tirar del todo la toalla.

"Tu reloj está roto"

El personaje de Pedro Pascal es un claro reflejo de la pérdida de alma de esta nueva civilización. No tiene nada por lo que vivir, pero tampoco se abandona a la muerte, se pone delante de los soldados de FEDRA o se lanza a las fauces de los deformados chasqueadores. Por el camino, eso sí, se ha convertido en alguien capaz de matar por alguna ración más al final del día. Por otro lado está Ellie, una niña que ha nacido ya en este mundo podrido y que tiene que equilibrar la curiosidad de cualquier chavala de su edad con el peso de su mera existencia. Juntos van forjando una relación paternofilial que se convertía en una de las pocas luces que veíamos en el juego. Pascal y Ramsey emulan de manera impresionante esa creciente complicidad, esa necesidad de conexión humana que ambos necesitan, esa sensación de que ya no están solos ante todo esto. Destaca particularmente Ramsey, que consigue darnos una Ellie tan directa y carismática como lo era la versión pixelada, que sabe soltar un taco o terminar un chiste con un timing perfecto, y que logra contagiarnos con la inocencia que ese mundo todavía no le ha hecho perder. Joel y Ellie son una importante razón del éxito del videojuego, y sus versiones en carne y hueso están absolutamente a la altura.

'The Last of Us'

Decía antes que la serie consiguió sorprenderme desde la primera escena y es que supone toda una declaración de intenciones para, precisamente, los que venimos del videojuego. 'The Last of Us' tiene como showrunners al hombre detrás de ese serión que fue 'Chernobyl' y a uno de los padres del videojuego. En mejores manos no podía estar. Esa primera escena es la perfecta fusión de ambos: el saber hacer de Craig Mazin se suma a la increíble manera de contar historias de Neil Druckmann. Juntos dicen desde el primer momento a los jugadores que por supuesto que van a reconocer el viaje, pero la serie les va a llevar mucho más allá. Despojados de la necesidad de detenerse para introducir peleas, emboscadas o puzzles, los guiones de los capítulos aprovechan para expandir el universo del videojuego (a veces, quizás demasiado, con lo que me gustaba la ambigüedad en ciertos aspectos de la historia), y sobre todo a los personajes que van cruzándose Ellie y Joel por el camino.

Son los secundarios los más beneficiados por el salto al formato serial. Los que ya conocemos a Tommy (Gabriel Luna), Tess (Anna Torv), Marlene (Merle Dandridge) o Bill (Nick Offerman) vamos a poder descubrir muchísimo más de ellos y de sus historias, contadas con el mismo mimo que estaban las de Ellie y Joel en el juego. Con ellos aprovecha para mostrarnos otras caras de esta pandemia, llegando con algunas de ellas a echar un poco más de luz que bien le viene ante tanta oscuridad. Y todo resultando en el mismo nudo en la garganta que más de una vez se pone mientras echaba una partida. Hay en particular un episodio que desde que lo vi me cuesta muchísimo creer que pueda llegar a sentir con otra serie de este año tanto y tan fuerte como lo que consiguió despertarme esa hora de la serie. Neil Druckmann se puede permitir cambiar detalles de la trama porque para eso es su padre. Pero cada cambio, cada añadido están ahí por una razón: para elevar todavía más un relato sublime de luz, oscuridad, de héroes y villanos, y cómo en ocasiones las cosas no son tan fáciles.

'The Last of Us'

La serie también es apabullante en el apartado técnico. El nivel de detalle del diseño de producción es tal que llego a pensar que hay escenarios que están calcados a los de los videojuegos, del cartel de FEDRA avisando del toque de queda a los escombros y maleza que han convertido la jungla de asfalto de Boston de nuevo en dominios de la madre naturaleza. Esa sensación de abandono mezclada con el toque esperanzador de la vegetación retomando el control recrea estupendamente la atmósfera del videojuego. Es un gustazo ver cómo prácticamente todo es real, y el ordenador está utilizado con mesura y con cabeza. Los chasqueadores y demás tipos de infectados (cuanto más tiempo pasa, más deformes y sanguinarios se vuelven los anfitriones) tienen un trabajo de maquillaje y prótesis espectacular, y también están utilizados para crear impacto y no como hordas y hordas que acaban perdiendo la gracia al segundo encuentro con ellos. Si venís por ellos, no es vuestra serie. El uso de la luz o los maravillosos rasgueos de guitarra de Gustavo Santaolalla beben del material original, pero si algo funciona no es para nada necesario tocarlo. Hay mucho dinero invertido en esta serie, y el resultado es lo que merece un título ganador de más de dos centenares de galardones a juego del año. Es una superproducción en toda regla, pero lo que más brilla entre tanto dinero sigue siendo el guion. Siempre, por encima de todo, el guion.

'The Last of Us' se convirtió en 2013 en un fenómeno porque tenía elementos de sobra para impactar a los que se pusieran a los mandos. Pero lo importante era el poso que iba dejando a cada nuevo encuentro de Joel y Ellie con otros supervivientes. No es un "elige tu propia aventura" porque Neil Druckmann y Naughty Dog sabían muy bien lo que querían contarnos. Tan bien lo sabía Druckmann, que ahora que tiene la oportunidad de contarlo en otro formato es capaz de estrujar todavía más cada idea que vertió en el videojuego. Los que conocemos la historia vamos a descubrir más de cerca el desarrollo de la pandemia y a esos personajes que no tuvieron tiempo en el juego porque esa historia era de Joel y Ellie. La serie no es coral, Bella Ramsey y Pedro Pascal son los absolutos protagonistas, pero los minutos (el primer capítulo tiene casi la duración de una película) están aprovechados siempre para aportar, para enriquecer la historia. Y tranquilos, cada momento mítico del juego está. No solo se nota la mano de su creador sino también que Craig Mazin es uno de los mayores fans del título. Qué buena idea ceñirse solo al primer videojuego y a su DLC para la primera temporada, yendo al grano y no buscando estirar por estirar. Este universo tiene mucho potencial, pero si esto es una adaptación de 'The Last of Us', que así lo sea.

'The Last of Us'

Envidio en cierta manera a los que entréis de nuevas con la serie. Preparaos para vivir un viaje lleno de acción y suspense con dos personajes de los que os va a costar desprenderos cuando termine. De un camino que no es para nada fácil. Estad listos para enfrentaros a los lados más oscuros del ser humano, y para debatir largo y tendido sobre ellos después de cada episodio. Deberían ser un acontecimiento semanal. Preparaos para recibir un montón de patadas en el estómago hasta entender por qué merece la pena luchar en un mundo sin esperanza. Preparaos para la serie de zombis en la que los zombis son lo menos importante (sin desmerecer para nada cada maldito encuentro con alguno de ellos cuando menos lo esperéis). Preparaos, aunque sé que estamos en enero, para muy probablemente la serie del año.

'The Last of Us' estrena su primer episodio el lunes 16 de enero en HBO Max y lanzará un capítulo semanal.

Nota: 9

Lo mejor: Es la adaptación fiel, carísima y con alma que merecía el videojuego, y a la vez sabe expandirlo y hacer las modificaciones necesarias para aprovechar al máximo la historia y el tono. La química de Pedro Pascal y Bella Ramsey. La frescura de la Ellie de Ramsey. Y Murray Bartlett tenía razón: uno de los capítulos alberga "una de las mejores horas de televisión".

Lo peor: Ciertos añadidos al asunto del Cordyceps no funcionan tan bien como otros. Como el videojuego, la serie va a despertar en cierto sector del público lo peor de sí mismos.