'La profecía': Cómo la película ¿maldita? de Richard Donner se convirtió en un taquillazo

Fue uno de los productores de la Warner quien puso en marcha la idea para la película. Se trataba de Harvey Bernhard, quien acabaría impulsando el proyecto directamente inspirado por una premisa que había surgido durante una conversación con un amigo suyo en 1973, sobre la llegada del Anticristo al mundo actual.

Bernhard se puso en contacto con el guionista David Seltzer, quien tardó un año en tener listo el guion definitivo de lo que sería 'La profecía', la cual iniciaría su proceso de pre-producción a principios de 1975.

Antes de que Gregory Peck fuese el escogido para interpretar a Robert Thorn, fueron varios los nombres que se estuvieron barajando para protagonizar la película.

El primero fue Oliver Reed, considerado por la Warner el candidato perfecto. La siguiente opción fue William Holden, quien acabó rechazando el proyecto porque no se veía con la capacidad de protagonizar una película sobre el Anticristo.

Charlton Heston, quien parecía ser el actor definitivo, prefirió no involucrarse debido a que el rodaje iba a ser en Europa y porque tampoco estaba muy convencido con el tratamiento que iba a tener la temática satánica.

Charles Bronson, Dick Van Dyke y Roy Scheider también fueron considerados para el rol, hasta que finalmente llegó la opción de Peck, quien aceptó encantado la propuesta.

El 26 de junio de 1975, antes de que Gregory Peck aceptase el papel de Robert Thorn, el hijo del actor, Jonathan Peck, de 31 años de edad, fue encontrado muerto en su domicilio a causa de lo que las autoridades declararon como un claro caso de suicidio.

Cuando parecía que la lista de candidatos no terminaba nunca y que no se encontraba el actor idóneo para el papel, Peck consideró que interpretar a un padre atormentado serviría como forma de redención para poder acabar con el sentimiento de culpa que sentía por la muerte de su hijo.

Fue el propio Richard Donner quien se encargó de escoger personalmente a Damien. El director había decidido que todos los niños que se presentasen para el papel tenían que atacarle, simulando la escena en la que el personaje se lanza sobre su madre en la escena de la iglesia.

El joven Harvey Stephens no se lo pensó dos veces y acató las órdenes de Donner, arañándole la cara y asestándole una patada en la entrepierna. El director tuvo que pedir que le quitasen al niño de encima y que le tiñeran el cabello de negro. El papel era suyo.

El guionista David Seltzer había creado al personaje de Mrs. Baylock a detalle, dotándole de una serie de características que nada tenían que ver con lo que vimos en pantalla.

En un primer momento, se tenía que tratar de una apacible señora irlandesa de carácter cálido y amable, pero cuando Billie Whitelaw llegó a la audición, optó por cambiar el diálogo que tenía que recitar, convirtiendo el personaje en uno tan siniestro que acabó por encandilar a Richard Donner, quien le dio de inmediato el papel.

'La profecía' puede presumir de ser uno de los pocos títulos de terror que han conseguido un Oscar, el cual se llevó Jerry Goldsmith en 1977 por la banda sonora.

La película, que había conseguido además estar nominada en la categoría de Mejor canción por el tema 'Ave Satani', fue la que hizo que el compositor ganase el primer y único Oscar de su carrera, durante la cual estuvo nominado hasta en 18 ocasiones. Curiosamente, Goldsmith declinó la oferta de asistir a la ceremonia de entrega, pues ya había visto cómo eran otros los que ganaban las ocho veces anteriores que había acudido como nominado.

En un primer momento, el hecho de tener que contar un perro que tenía que comportarse de forma violenta podía suponer un problema.

Sin embargo, la mascota de la Sra. Baylock (Billie Whitelaw), la cual servirá como especie de compañía infernal del joven Anticristo, provocó una serie de problemas que nadie esperaba: en lugar de mostrarse lo amenazadora que tenía que parecer, cada vez que Richard Donner gritaba "¡acción!" en alguna de las secuencias que tenía que aparecer el can, este se abalanzaba sobre la gente para que jugasen con él y lamerles la cara.

Con la intención de que la secuencia fuese verídica, y tal y como el propio Richard Donner confirmó en entrevistas posteriores, la escena del ataque de los babuinos aterrorizó a la actriz Lee Remick, cuya reacción fue totalmente real.

Rodada en el zoológico de Windsor, para llevarla a cabo uno de los trabajadores del parque cogió a una cría de babuino por la cabeza desde el asiento trasero del coche (fuera de plano), lo que provocó que los primates se lanzasen sobre el vehículo con la intención de atacar a sus tripulantes.

Durante años, se ha hablado de la maldición de 'La profecía' la cual no es más que una fatal concatenación de infortunios que se vivieron durante el rodaje de la película.

Pese a que el perro que ejercía como estrella principal fuese demasiado dócil, los entrenadores de los animales sufrieron el ataque de otros de los rottweilers con los que se contó para el rodaje. Otras casualidades más siniestras son las que tuvieron que ver con los aviones: el guionista David Seltzer y Gregory Peck viajaban en diferentes aviones hacia el Reino Unido, y ambos vuelos fueron alcanzados por sendos rayos. El actor, que canceló a última hora un vuelo a Israel, se enteró de que el avión que debía haber cogido se estrelló matando a todos los pasajeros.

Richard Donner sufrió en sus propias carnes un pequeño accidente de coche, al cual también sobrevivió parte del equipo técnico durante el primer día de rodaje. Además, el hotel en el que se hospedaba el director sirvió como enclave para un atentado del IRA.

El dato más trágico llegó cuando la película se encontraba en la sala de montaje, pues el responsable de efectos especiales John Richardson sufrió un terrible accidente mientras se encontraba trabajando en otra película, en el cual su novia murió decapitada.

El propio David Seltzer fue el encargado de escribir la novelización de la película, la cual se publicó el mismo año del estreno. El éxito en taquilla de la película propició que se pusiera en marcha una serie de secuelas, las cuales tuvieron sus propias adaptaciones en novela, universo que tomó otros derroteros hasta llegar a su quinto libro.

En 1978 se estrenaba 'La maldición de Damien', dirigida por Don Taylor. En 1981 Sam Neill se metía en la piel de un Damien adulto en 'El final de Damien', dirigida por Graham Baker. Para la cuarta entrega, 'La profecía IV: El renacer', estrenada para la televisión y con Dominique Othenin-Girard en las labores de dirección, se cambió a Damien por una niña.

En 2006, se estrenaba el fallido remake 'La profecía', dirigido por John Moore y en el que lo único destacable fue el ver a Mia Farrow como la nueva Mrs. Baylock.

Diez años más tarde, A&E emitía 'Damien', serie de diez episodios en la que un adulto Damien Thorn optaba por asumir su rol como el Anticristo.